Ya es tarde para arrepentirse

ERRORES . Cuantas veces hemos cometido errores, cuantas veces nos hemos sentidos culpables, cuantas veces hemos deseado volver atrás en el tiempo para cambiar nuestros actos. Pero que va… la cagada está hecha y lo único que puedes hacer es enfrentarte a ella. No importa cual pueda ser tu primera reacción. Puedes llora, gridar, tumbarte en el suelo, romper platos o destrozar tu cuarto, pero eso no cambia lo que has hecho. Mírate al espejo, mírate a los ojos y respira. Cualquier error hayas cometido las cosas irán bien… al fin y al cabo. Solo necesitas tener consciencia de él y estudiar un plan de acción. Pues si. A mi me encantan los planes; me encanta organizar todo y tener mi vida bajo control para evitar cometer otros errores. ¿Pero sabes que te digo? Es inútil. Eso no cambia nada. Porque aún así tus sentimientos no siempre te permiten seguir tus planes y vuelves a caer en otros errores. Y fallas, una y otra vez; a veces ni siquiera te das cuenta, pero en otras ocasiones sabes en que lio te estás metiendo y aun así sigues sin pensar en las consecuencias. Yo no soy muy religiosa pero algunas historias consiguen hacerme reflexionar: Eva sabía que no tenía que morder la manzana, pero no pudo evitarlo. Las circunstancias siempre cambian las cosas… siempre nos cambian. “¿Volverías a cometer el mismo error? “ “Pues claro que no”. Y sin darte cuenta estás rezando, así come hiciste el mes pasado… Es tan fácil darse cuenta de lo que no tienes que hacer y tan difícil respectar tus promesas. Estoy segura que el 80% de las chicas que están leyendo eso saben perfectamente de lo que estoy hablando. Tu eres quien no me hace pensar en las consecuencias, la persona con la cual mi parte racional se hiberna, tu eres mi error más grande, pero más pienso en lo correcto, más cometo el errado. Gracias por ser mi ‘chimba’ de error.